sábado, 28 de septiembre de 2013















Contradicciones y previsible descalabro: ¿De cuál legado de Chávez me hablan?

Es casi obvia la polémica sobre el llamado “legado de Chávez” en las páginas de Aporrea y en otros medios de difusión y comunicación.  La polémica es en parte derivada por puntos de vista disimiles, como por el uso de evidencia contradictoria: textos, discursos, entrevistas, decisiones e intervenciones del propio Chávez a lo largo de 22 años de entrada en la escena política desde la rebelión militar del 4 de febrero de 1992.
Con la salida física de Chávez de la escena política el 5 de marzo de 2013, quedan las diferentes interpretaciones de su legado político y los efectos materiales y textuales de su pensamiento y acción.
La revolución bolivariana, y lo que ahora llaman “chavismo”, se debate en la inmanencia de estas interpretaciones, en sus conflictos y acuerdos básicos.
El problema que se presenta con esta situación, es que son pocos y cada vez menos los espacios para dilucidar con rigor de pensamiento y un mínimo de ética política, tales interpretaciones y posicionamientos. Y si a esto se agregan dispositivos de censura y de monopolio del pensamiento autorizado de Chávez, el cuadro se complica gravemente.
En este marco, escuché hace algunas semanas atentamente al Ministro Merentes conversando con José Vicente Rangel, y la impresión final es que por “pragmatismo” debemos comprender la convivencia necesaria entre el capital privado y el Estado en función del “desarrollo nacional”, así como concebir una “economía mixta” que presente al “socialismo” como “distribución de la riqueza” sin afectar el cuadro de reglas básicas de la economía capitalista de mercado.
Es evidente que tales planteamientos son funcionales a una izquierda reblandecida, al reformismo de siempre, a la socialdemocracia y al desarrollismo del que viven los políticos y economistas “pragmáticos” y “realistas” de todos los pelajes.
No hace falta ser un especialista en análisis del discurso o de contenido para comprender que la audiencia objetivo de esa entrevista eran fundamentalmente los sectores empresariales y algunos sectores de las capas medias del país.
Asociar a Merentes con la resolución de los “cuellos de botella” de la economía y con la concertación de políticas entre Estado y sector privado es parte de un mensaje continuado que aparece en toda la orquestación mediática (oficial o no).  La narrativa de Merentes “el bueno” y Giordani “el malo”,  es otro de los cuentos mediáticos que se tragan las audiencias pasivas.
Por mi parte, observo estas narrativas como los efectos de las contradicciones de fondo sobre la clarificación de las ideas socialistas del gobierno de Maduro.
Probablemente,  sin la cobertura política e ideológica de la presencia de Chávez, del árbol sólo quedará decir: “por sus frutos los conoceréis”. El carisma de Chávez articuló  no sólo a un pueblo desencantado y desilusionado por el fracaso de la llamada cuarta República para abordar con éxito la “cuestión social”, la canalización de las luchas anti-neoliberales que ponían en riesgo la existencia misma de centros nacionales de decisión y las demandas de mayor democratización de las esferas de poder, sino que también también amalgamó con éxito un lamentable archipiélago de izquierdas, micro-fracciones y  algunos notables “independientes” cuyo mínimo común se había difuminado por otro legado: la derrota estrepitosa de la izquierda revolucionaria desde los años 60, y su debilidad electoral orgánica hasta la llegada de Chávez al gobierno.
Ese archipiélago de agrupamientos “arrimado” a Chávez bajo la tesis de que a “el que a buen árbol se arriba, buena sombra lo protege”, debe ahora enfrentarse desde sus propias fuerzas y capacidades a sus propias sombras y encandilamientos ideológicos.
Por cierto, si algo deben valorar de Chávez todos esos partidos, individualidades y organizaciones de izquierda es la de haberles dado la oportunidad de reposicionar ideas, prácticas y valores asociadas al antiimperialismo y al socialismo, en un cuadro de profundización de la democracia en la dirección del ejercicio directo de la soberanía popular. Ese guion estaba hecho trizas en los años 80 y 90. Sólo el llamado a una constituyente puso de nuevo sobre el tapete la combinación entre realismo político y fantasía utópica, sin la cual la política es sólo arte pragmático de lo posible para negociar una arena de intereses entre factores de poder.
Hugo Chávez, ya en un cuadro de complicación de su salud, llamó en el mes de diciembre del año 2012 a la unidad nacional y revolucionaria bajo el entendimiento de la probabilidad de ocurrencia de los peores escenarios. Y ocurrió lo peor.
Ya Hugo Chávez no está presente físicamente para intervenir directamente en el manejo de las contradicciones internas.  En este contexto, ¿habrá madurado el archipiélago de las izquierdas y de grupos aparentemente nacionalistas (que de izquierda parecieran tener poco), sobre cómo entender el manejo de las contradicciones en su seno, y en el seno del pueblo, tal como señaló en alguna oportunidad Mao?
La viabilidad de una era post-Chávez depende de la resolución de esa interrogante.
Por otra parte leí  con atención escritos de  Carlos Lanz quien insistía en los textos del “Programa de la Patria” y en el “Golpe de Timón” sobre dos objetivos centrales de lo que se sintetiza el llamado a “traspasar la barrera del no retorno” (es decir, bloquear cualquier intento de restauración del punto-fijismo y de la hegemonía del capitalismo): a) desmontar el Estado Burgués, b) romper definitivamente con la lógica del Capital.
Es claro que tomar la primera vía esbozada por Merentes en la entrevista con JVR, se convierte en algún momento y circunstancia precisa en una contravía para la interpretación de Carlos Lanz (entre otros que opinamos que en algún momento habrá que resolver la ecuación de poder que haga viable ese propósito; es decir, con cuales relaciones de fuerzas se supera el capitalismo y el Capital que por cierto no son exactamente lo mismo).  Al parecer aquí hay sectores que se han reconvertido en minimalistas y concertadores, y otros en maximalistas sin mediaciones con las relaciones de fuerzas concretas que presiden una situación.
Ciertamente, la “conciliación de clases” es un enunciado ausente de las consecuencias de seguir con coherencia una clara política revolucionaria de no retorno elaborada por Chávez.  La posibilidad del socialismo, como transición anticapitalista, se juega en el cuadro de los conflictos políticos de clase; y como señaló Gramsci en su clásico escrito sobre “El análisis de situaciones. Relaciones de fuerzas” (http://www.gramsci.org.ar/tomo4/065_analisis_situc.htm, existirán repercusiones incluso en el ámbito internacional y militar. ¿Quiénes pueden señalar que luego de los resultados electorales de abril, la correlación de fuerzas es ampliamente favorable para un acelerado tránsito a medidas radicalmente socialistas? ¿Quiénes están trabajando en función del fortalecimiento de este aspecto electoral de la correlación de fuerzas, y en otros aspectos organizativos, de movilización, políticos y militares de la correlación de fuerzas? ¿Quiénes están trabajando efectivamente en la unidad, articulación, acumulación de fuerzas revolucionarias?
Los documentos más recientes de “Marea Socialista”(http://www.rebelion.org/noticia.php?id=168369http://www.rebelion.org/docs/172887.pdf), por su claridad de ideas, advierten sobre la perdida de rumbo de la revolución bolivariana ante el actual cuadro de política económica y sus indefiniciones sobre cuáles serían las medidas a tomar para clarificar el rumbo de la transición al socialismo y defender las conquistas de la revolución bolivariana. Sin embargo, el tema sustantivo sigue siendo cómo ir más allá del diagnóstico y pasar a la agregación de una voluntad colectiva nacional-popular que haga posible superar el actual cuadro de política.
Cabe reconocer que estas ideas no encuentran amplias resonancias en el chavismo popular, que sigue siendo un mar de orientaciones disimiles, de aspiraciones redistributivas, de consuelos reivindicativos, de agrupaciones con fuertes dosis de narcisismo cobijadas en el cuento de que dos singularidades son un “movimiento social”.  No hay partido alguno en el GPP que abandere sin mezquindades la unidad de propósitos a la que llamó Chávez en diciembre del 2012. Desde el más grandote al más chiquitico se observan signos de debilidad electoralista y sectarismos. Los mariscales de la derrota se hacen pasar por imitadores del gran estratega Chávez.
Además de corrientes como “marea socialista”, hay que reconocer un variopinto y numeroso conjunto de colectivos, fuerzas políticas, organizaciones y movimientos que son mucho más que un “saco de gatos”, que apuntan a mostrar su inconformidad frente a una opción que implique abandonar el “legado revolucionario” de Chávez en la actual coyuntura y que aspiran que existan reales espacios de debate y manejo colectivo de políticas y decisiones.
Se le critica a la alta dirección del PSUV y del Gobierno que no contribuya a construir una dirección colectiva del proceso, y se cuestiona que esta idea sea un mareo para que sea el mismo cogollo de siempre el que tome las determinaciones finales.
Por otra parte, gente que piensa evidentemente distinto en ciertos temas fundamentales, como Vladimir Acosta, Toby Valderrama o Nicmer Evans advierten sobre el extravío ideológico y político con relación al “legado de Chávez”; y paradójicamente tienen en rasgo común el que fueron sometidos al implacable tribunal de la censura por no acatar la línea política tácita y correcta del “oficialismo”; es decir, por criticar las acciones, discursos o decisiones del gobierno de Maduro pasaron a formar parte de una “desviación ideológica” que tiene evidentes consecuencias en su permanencia como voceros de opinión en espacios oficiales de la revolución.
Por cierto, el lenguaje de las “desviaciones ideológicas” se institucionalizó en la URSS en 1928 aproximadamente en un periplo que paso desde la liquidación de la “oposición obrera” a la liquidación de la “plataforma de oposición de izquierda”, para abiertos objetivos de control vertical de opiniones (desde ese momento “disidentes”) desde el aparato político (del Estado y del partido-único), disolviendo así el caldo de cultivo de la lucha entre tendencias, pues si toda opinión contraria al dictat del aparato es desviación, toda desviación es el preámbulo de la división y la traición. En fin, de allí al delito de “enemigos del pueblo” había una  lógica circular e implacable. Se pueden hacer algunas analogías con conductas de los funcionarios del aparato en Venezuela.
De manera, que la unidad anhelada por Chávez pareciera estar siendo echada por tierra desde arriba y desde las mezquindades también presentes desde abajo. Si no se constituyen mecanismos y espacios efectivos de debate entre opiniones y tendencias en función de la unidad de propósitos (encontrar el mínimo común de todas las fuerzas sociales y políticas que apoyan la revolución bolivariana), entonces los viejos errores del archipiélago de las izquierdas aparecerán con su sello de fábrica, y las consecuencias serán harto desastrosas.
Por otra parte, si no se parte del reconocimiento de las propias opiniones contradictorias de Chávez a lo largo de 22 años de trayectoria en la escena política, el legado revolucionario de Chávez enfatizará no la unidad de propósitos en función del cambio estructural de la sociedad venezolana, sino todas las fuerzas centrifugas que podrían explotarse para mostrar que “del árbol caído se hace leña”, utilizar a Chávez para justificar los propósitos propios de cada micro-fracción (aunque se llame PSUV); es decir, el “narcisismo de las pequeñas diferencias”.  No por pura casualidad, un anterior aliado, luego radical opositor llamo a la revolución bolivariana un “Minestrón ideológico” (Miquelena dixit)
Finalmente se respira un problema en el ambiente.  Sobre si Chávez era socialdemócrata o marxista, para poner  un ejemplo que pareciera estar en la palestra, podrían hacerse numerosas pesquisas, siempre que se clarifiquen los términos que se usan.
Esto último lo digo porque no era lo mismo ser socialdemócrata en 1905, por ejemplo, Rosa Luxemburgo y Lenin lo eran, que serlo en la actualidad, lo cual significa simple y llanamente “liberalismo social” y claro “reformismo”; es decir, administrar la gestión del capitalismo sin modificar sus estructuras.
Igual ocurre con el término marxismo: ¿Qué significar hoy definirse como “marxista”? ¿A cuál marxismo de todos los marxismos realmente existentes se hace referencia? Lamentablemente Chávez no está para que diga lo que piensa sobre estos temas.
De manera que hay situarse adecuadamente en circunstancias de tiempo, modo y lugar para desentrañar cómo cada actor utiliza sus marcos de interpretación, sus guiones ideológicos, como diría Umberto Eco, sus diccionarios y enciclopedias.
Sobre este último punto, siempre me llamaron la atención las líneas escritas de la entrevista de Sean Penn a Chávez en el año 2008 (http://www.prensadefrente.org/pdfb2/index.php/a/2008/11/30/p4232), como las declaraciones de Chávez en el año 2010 autodefiniéndose como cristiano y marxista (http://www.noticias24.com/actualidad/noticia/137694/chavez-ratifica-que-es-marxista-pero-ademas-dice-que-es-cristiano/).  En la primera entrevista es posible leer:
“Hitchens está sentado en silencio, tomando notas durante toda la conversación. Chávez reconoce un brillo escéptico en sus ojos. –CRÍS-a-fer, hazme una pregunta. Hazme la pregunta más difícil. Ambos comparten una sonrisa.  Hitchens le pregunta:  –¿Cuál es la diferencia entre usted y Fidel?”.  Chávez dice: –Fidel es comunista, yo no. Yo soy socialdemócrata.  Fidel es marxista-leninista.  Yo no.  Fidel es ateo.  Yo no.  Un día discutimos sobre Dios y Cristo. Le dije a Castro: “Yo soy cristiano.  Creo en los Evangelios Sociales de Cristo". Él no. Simplemente no cree. Más de una vez Castro me ha dicho que Venezuela no es Cuba, que no estamos en los años sesenta.  –Ya ve –dice Chávez–. Venezuela tiene que tener un socialismo democrático. Castro ha sido un profesor para mí. Un maestro.  No en ideología, sino en estrategia.”
En el segundo documento (audiovisual), Chávez, plantea en el marco de una particular interpretación de la metáfora del despegue económico (¿Rostow dixit?) en el marco de la crisis del capitalismo que: “Yo soy marxista y soy cristiano, y creo que el marxismo y el cristianismo pueden ir agarrados de la mano por el camino del hombre, del ser humano, de la dignidad de los pueblos”.
De manera que es muy difícil no darse cuenta que es posible explotar estas opiniones de Chávez para fines particulares que apoyen o la tesis de la socialdemocracia en Chávez o la tesis del marxismo revolucionario, incluso de no ser enemigo de la revolución comunista aunque en estos momentos eso no este planteado como señaló en otras entrevistas (¿O es que caso Marx no era básicamente un pensador comunista?).
El asunto principal, sin embargo, no es sólo este, sino clarificar las intencionalidades políticas que se están moviendo tras la escena en función de fortalecer o no la unidad de propósitos para continuar el legado revolucionario de Chávez; o quienes realizan una operación de distorsión deliberada de la dirección, contenido y alcance dado a la revolución bolivariana de acuerdo a la coherencia del mensaje de campaña de Chávez para conquistar su última victoria en octubre de 2012. ¿O es que acaso no hay diferencias ostensibles entre la campaña del 2012 y la campaña del 2013?  He allí el asunto.
Por tanto no me hablen del “legado de Chávez” como fórmula imprecisa, con criterio de mescolanza ideológica, sino del legado revolucionario de Chávez como orientación final hacia la Democracia socialista y hacia una economía de transición caracterizada como mixta pero con carácter socialista (con predominio de la propiedad social directa e indirecta sobre el gran capital y sobre sus fracciones especulativas, por ejemplo), no de carácter predominantemente capitalista como la que se apuntala con el cuadro de política económica, desarrollismo y reformismo que patéticamente aparece en la praxis efectiva de la política pública del presente.
No me enreden las palabras, por favor.  Como tampoco nos hagamos los locos celebrando que nos presten 5 mil millones de dólares Chinos (por cierto, una China socialista que puede apoyar la revolución bolivariana como no hacerlo, como hicieron con Allende y luego apoyar a Pinochet, no olvidemos) para correr la arruga, cuando no sabemos aún  a quienes les dimos 20.000 millones dólares en el SITME en el año 2012 y donde están los reales beneficios de esta masiva transferencia de divisas.
Lo demás son cuentos, imaginarios, simulacros y espectáculos de la orquestación mediática que ya todos conocemos (¿O acaso Chávez no incito a decodificar críticamente los medios, incluso los medios oficiales?). Tampoco manoseen tanto a Chávez para fines de legitimación de una secta, un grupúsculo o fracción que se enarbola como la auténtica voz revolucionaria. Eso es síntoma de naftalina revolucionaria, un síntoma de no haber metabolizado la derrota de los años 60.
En fin de cuentas y de cuentos, no creo que el legado revolucionario de Chávez pueda tramitarse como un vulgar “Pote de Humo”.  ¿Están contribuyendo a la unidad y acumulación de fuerzas?
Ojala rectifiquen todos, pues sin rectificación habrá razones de sobra  para tomar distancia del previsible descalabro.  Y no busquen chivos expiatorios.  Saquen del baúl las tres R, las seis R o sólo una R: Revolución, no rapiña sobre los recursos públicos.

Esta nota ha sido leída aproximadamente 2650 veces.

Javier Biardeau

Articulista de Opinión. Promotor del Pensamiento Crítico Socialista. Profesor de Estudios Latinoamericanos-Sociología UCV. Magister en Planificación del Desarrollo. Integrante de la Plataforma Patria Socialista.
  jbiardeau@gmail.com

lunes, 23 de septiembre de 2013

LAS DOS DERECHAS ENDOGENAS Y LA GUERRA ECONÓMICA.






Las dos derechas, la derecha endógena y la "guerra económica"

Mi muy querido, respetado y ausente físicamente, aunque con mucha vigencia en sus ideas Rigoberto Lanz en el año 2006 (http://www.aporrea.org/ideologia/a21573.html)  escribió sobre dos tipos de derecha: "la histérica" y "la liberal" refiriéndose a las dos corrientes que se desarrollaban en aquel momento del lado opositor venezolano, una con odio de clase y otra con claridad ideológica liberal o neoliberal, y conciencia de clase burguesa.
Para Rigoberto, entre estos dos tipos de derecha, la más peligrosa era "la histérica" y con la que se podía dialogar de manera transparente era "la liberal". Al leer este artículo me ha sido inevitable preguntarme si existe un tercer tipo de "derecha" venezolana o si las de Rigoberto se han unificado y ha emergido una nueva segunda derecha, la "derecha endógena", la infiltrada, aquella que dentro del proceso revolucionario se ha logrado posicionar, con franela roja y Chávez en la boca, de espacios estatégicos de poder con el fin único de enriquecerse, potenciar el rentismo petrolero y poner en verdadero riesgo el legado del Presidente Chávez.
Sabemos que la derecha histérica o liberal es oposicionista, es claramente identificable, ha mostrado sus colmillos de manera permanente, por tanto es un adversario que aunque cobra diversas formas, está definido. Pero hay otra, la más peligrosa para el momento histórico que vivimos, aquella derecha que durante años se ha ido posicionado dentro de las estructuras de poder, que dice ser socialista y chavista, aquella que es incapaz de críticar públicamente algún desacierto de nuestro gobierno o dirigencia política, porque tiene muy claro su objetivo, acceder a todos los niveles de poder a través del la sumisión y el "jalamecatismo".
La estrategia de la "derecha endógena" es muy sencilla, sin pasado de lucha revolucionaria conocida, en el anonimato, por compadrazgo o "méritos técnicos" van posicionándose espacios que permiten ir acumulando poder, su interés no es un bien colectivo, ni el desarrollo de un Estado Comunal, pero no tienen ningún prurito en copiar la estructura discursiva revolucionaria y reproducirla, aunque sus acciones estén absolutamente contrapuestas a los valores pregonados. Son pragmáticos y obedecen las instrucciones bajo una " disciplina" que no cuestiona nada, aún cuando se sepa que eso producirá daños irreparables a la revolución.
Pero no queda ahí, los más habilidosos de la derecha endógena, además de saber preservar puestos de poder, empiezan a acumular capital, y para ello desplazan al que lo denuncia, intimidan al revolucionario más valiente, y compran la complicidad de los más débiles. Se convierten en una red, ya que entre ellos se identifican rápido y articulan acciones para seguir acumulando más poder y más capital.
Algunos en el camino se cansan, y deciden retirarse para disfrutar de su condición real de "nuevos ricos" o "burgueses rentistas", otros salen de la red por conflicto de intereses o por afectación a terceros en la acumulación de capital, estos últimos caen en desgracia y terminan siendo investigados, juzgados y algunos, los más pendejos, terminan presos, todo dependerá del nivel de información que manejen.
Esta "ultra derecha endógena" controla algunos medios de comunicación claves, algún sector de la banca, importaciones en casi todos sus niveles, se vincula al narcotráfico y una parte de la industria petrolera, en pocas palabras, no producen nada, se basan en la especulación financiera y de divisas, y además generan presión en la fijación del precio paralelo de divisas.
Pero la "ultra derecha endógena" no trabaja sóla, ya que en su afán de acumulación y como un asunto de castas, está se entrelaza con la "derecha histérica " o con la "derecha liberal", se casan entre ellos, uno financia al otro en los capitales semilla que garantizan la multiplicación exponencial en muy corto tiempo de las ganancias, con la garantía de la impunidad basada en el uso de la estructura del Estado Bugués rentista que heredamos y aún existe intacto.
Y mientras tanto, la guerra económica es denunciada por el Presidente Maduro, y en su discurso el señala como responsable sólo a "la derecha del frente" obviando a "la derecha endógena", aquella que realmente tiene la capacidad de hacer una guerra y gestar las condiciones para un golpe económico tipo Chile.
Propongo que éste tema sea debatido con firmeza y transparencia dentro de las bases del PSUV y del GPP y que pueda caracterizarse el asunto para tomar las medidas pertinentes. En lugar de hacer una cacería de brujas contra la crítica, ¿Por qué no librar una lucha contra la única y verdadera derecha que puede librar una guerra económica con éxito junto con la derecha tradicional? La derecha endógena.
Nicmer N. Evans
nicmerevans@gmail.com
evansnicmer.blogspot.com
@NicmerEvans

domingo, 22 de septiembre de 2013

Al Pueblo Bolivariano (Civil y Militar)
A todo el Pueblo Trabajador de Venezuela
Al Consejo de Estado
A los compañeros Chávez, Maduro, Diosdado y Ernesto Villegas.

RECIBAN TODOS UN SALUDO FRATERNAL Y REVOLUCIONARIO.

En principio, con toda la alegría y solidaridad militante nos sumamos a la entusiasta bienvenida y recibimiento expresado multitudinariamente por nuestro pueblo al hijo más destacado de nuestro Patria Grande en los últimos tiempos.

Hoy 27 de Febrero, a 24 años de la Jornada Popular Insurreccional de 1989, frente al icono que agrupa a la mayoría de los gremios privados de la burguesía empresarial, comercial y financiera en la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (FEDECAMARAS), nos dirigimos a ustedes, a través de este remitido público, para precisar los siguientes aportes y propuestas que venimos debatiendo desde el espacio que viene impulsando el Encuentro Nacional del Pueblo Bolivariano en Lucha:

PRIMERO: Vivimos en un mundo sometido a la lógica del capital y en medio de una crisis económica integral y estructural que tiene su origen en la flexibilización o estafa especulativa legalizada a lo interno del Sistema Financiero Internacional, que beneficia a los dueños del gran capital, a todo su entramado empresarial, bancario y comercial y que perjudica a todas las economías y pueblos de las naciones del planeta, incluido el propio pueblo estadounidense. Esta crisis, como se puede ver diariamente en los medios de comunicación, no la pagan los responsables de esta estafa económica mundial sino que la hacen recaer en las familias trabajadoras del mundo. De allí el crecimiento del desempleo, el ataque al salario, a las históricas conquistas laborales, la privatización de sectores como la salud y la educación, el aumento de las tarifas en los servicios públicos (agua, electricidad, aseo, gas y telefonía) y, principalmente, la agresión contra las distintas monedas nacionales sobre la base de la paridad cambiaria que se establece con el dólar: la moneda “patrón” catalogada como dinero inorgánico y el papel basura más desprestigiado en el mundo debido a la inmensa deuda contraída por el gobierno capitalista de EE.UU y la inconmensurable suma que acumulan sus acreedores: prevista para el mes de mayo en 17 billones de dólares y que aumenta a una media de 3,83 mil millones de dólares por día, es decir, el gobierno capitalista de EE.UU. es el gran moroso y deudor del mundo, que ha inundado e infectado de papeles en dólares y bonos de la reserva federal (FED) todo el Sistema Financiero Internacional y que, contradictoria e inexplicablemente, ha sabido sortear con la colaboración de los gobiernos del mundo la inevitable caída o crisis terminal del actual Sistema Monetario Internacional que aún tiene como agente perturbador la decadente moneda imperialista.

SEGUNDO: Llamamos a un gran debate con el Pueblo Bolivariano y Trabajador, que ya se ha iniciado debido a la devaluación de nuestra moneda, que tiene sus causas, entre otras, en las implicaciones del punto anterior y que solicitamos sea promovido e impulsado por el Sistema Nacional de Medios Públicos. Un debate protagónico, en proceso constituyente y que tenga como orientación central favorecer el Trabajo frente a la lógica del capital internacional y nacional, es decir, contra su personificación: la burguesía empresarial, comercial y financiera del país que se beneficia por partida doble y hasta triple debido a esa lógica especulativa y corrupta que de manera natural impera en toda economía capitalista, que enmascaran bajo ese contrabando de la “mano invisible del mercado” y donde los miembros de FEDECAMARAS, CONIDUSTRIA, CONSECOMERCIO, CAVIDEA y la BANCA PRIVADA son actores principales que han actuado en complicidad con funcionarios corruptos y cooptados por la burguesía para acorralar al Gobierno Bolivariano. Debate que se oriente en toda la línea revolucionaria que ha marcado la disposición de cambio de nuestro pueblo y en el que proponemos desatar los siguientes nudos:

1. Activar la Asamblea Constituyente del Pueblo Trabajador. Una propuesta que junto al Vicepresidente Nicolás Maduro se impulsó en 1998 con el Frente Constituyente de los Trabajadores, que apuntaba a colocar a la clase como actor protagónico-transformador del actual modelo productivo y concebida para Refundar el Movimiento de los Trabajadores de la Ciudad, el Campo y el Agua en correspondencia con los avances conquistados en la nueva Constitución de 1999. Hoy esta propuesta sigue vigente y adquiere una principalísima importancia debido a la ofensiva del capital que gana espacio contra el Trabajo. Su activación se convierte en un problema de vida o muerte para el proceso revolucionario si la clase trabajadora no actúa conscientemente en su papel de vanguardia en las tareas de la transición socialista. Abramos el debate, que sea el propio Pueblo Trabajador quien decida de manera autónoma y democrática. Actuemos como animadores de un dialogo constituyente que cualifique la base social que blinda el proceso bolivariano. Promovamos la construcción de un pivote clasista que haga retroceder la ofensiva del capital en nuestro país y que sirva de ejemplo a los demás pueblos en lucha que viven únicamente de su trabajo. 

2. Establecer el Precio de Venta al Público (PVP) junto al Precio de Costo (PC). Esta propuesta apunta a entregarle a las familias trabajadoras un instrumento poderoso que haga efectiva y ágil la Contraloría Social. PVP y PC por producción o importación etiquetado en cada mercancía es una medida más que esperada por el consumidor para actuar como pueblo contra la especulación programada. Trampa miserable de la burguesía comercial e importadora en toda la cadena de distribución que ya hay que detener y que permitiría acabar con la corrupción de muchos de nuestros funcionarios que se hacen la vista gorda ante la estafa que se hace contra el salario del pueblo trabajador. Establecer esta medida además contribuiría a sincerar los márgenes de ganancias de la burguesía, colocaría en contraste el subsidio que el gobierno revolucionario establece para los productos que importa y golpearía la cadena de corrupción que se ha enquistado en MERCAL, PEDEVAL y Abastos Bicentenarios por donde migran mercancías hacia un comercio clandestino que se blanquea en la redes minoristas y que incluso son vendidos más allá de nuestras fronteras

3. Ir a una Política Revolucionaria de carácter Tributario y Fiscal. Esta propuesta viene al caso porque los organismos del gobierno, encargados de elaborar el Presupuesto Nacional y los Informes Económicos relacionados con los planes del país, también deben actuar de manera constituyente para reventar la lógica contable con la que actúan gobiernos, técnicos y expertos economistas que maquillan y enmascaran la gran estafa de los dueños del capital mundial, con toda su red de operadores económicos y políticos en cada una de las naciones.

Imagínense la importancia de nosotros comenzar a transparentar contablemente las operaciones económicas (especulación legalizada) del gran capital, de cara a los pueblos, cuando el monto de los "negocios" financieros diarios, que informa Wikipedia para el mundo, supera el PIB anual de toda la América Latina.

Un gobierno anticapitalista, por lo menos en nuestro país, debería desentrañar toda esa lógica contable.

Por ejemplo, con motivo de la presentación ante la Asamblea Nacional del Presupuesto para el próximo año el ministro Giordani dijo:
"La inversión social en Venezuela, que ha sido privilegiada desde 1999 bajo la Presidencia de Hugo Chávez, continuará en 2013 su tendencia al alza para ubicarse en 147 mil 807,9 millones de bolívares, lo que representa 37,3% del Presupuesto Nacional".

Esto es verdad, pero desde el punto de vista revolucionario constituye un contrasentido que habría que corregir urgentemente. Veamos:

30,5 % del total de los ingresos de 2013 los aporta el IVA del total del Presupuesto Nacional, un impuesto indirecto, regresivo porque recae sobre el consumidor final y que junto a otros impuestos como a los licores y cigarrillos cubren casi la totalidad de la Inversión Social en Venezuela.

Habría que preguntarse:
¿Y, cuánto aporta la banca privada, las constructoras privadas, las clínicas privadas, las grandes empresas privadas nacionales y extranjeras, entre otras? Cómo hacemos para que de manera detallada la población se entere de los aportes directos de c/u de las grandes empresas, bancos, clínicas, importadoras, etc.

Lo que sí sabemos es que el aporte del Trabajo, a través de los sueldos, salarios y el rebusque de los informales y desempleados, 65 % de la población que vive únicamente de su trabajo (Población Activa), aporta el grueso de ese IVA y de esos otros impuestos indirectos.

Pero también sabemos que los que menos ganan, aportan desgraciadamente igual para el IVA que c/u de los millonarios que acumulan capital privado en el país. Ellos son menos del 1% de la población, y hasta el momento no diseñamos una política de impuestos directos a la ganancia y a las transacciones financieras que supere el viejo esquema impositivo capitalista. Un gobierno revolucionario, mínimamente debe, sobre la base de ese viejo Tema proporcional: "quién más gana más aporta", para irnos acercando a ese tipo de sociedad que proponemos como salida a los pueblos explotados y que es una tarea central de la transición revolucionaria.

Visto lo anterior, precisemos lo siguiente:

• Quienes más aportamos al Presupuesto Nacional (PN) somos la población en general, a través de un impuesto indirecto y perverso, el IVA, que alcanza casi el 30,5 % del PN y donde se pecha a la gran mayoría del país que vive únicamente de su salario, la cual no acumula privadamente capital como la burguesía ni como la burocracia que usufructúa delictualmente las riquezas del país.
• Aunque nos beneficiamos de la Renta Petrolera, ésta no es la que más aporta al Presupuesto Nacional como la mayoría cree. El IVA supera en casi un 10% el total de la contribución fiscal petrolera que asciende en el 2013 a Bs. 83.179.648.047 (20,98%).
• La contribución de los grandes capitales de empresarios y banqueros extranjeros y nacionales al Presupuesto Nacional se desconoce, se enmascara y confunde en la generalidad de la recaudación fiscal, cuando por el carácter socialista de nuestro proceso debería rigurosamente especificarse para el conocimiento público y la necesaria contraloría social. Porque tal como se presentan los datos, también en el ISLR, la Renta Aduanera y Otros Impuestos hay un aporte considerable que ingresa al fisco por vía del Trabajo, en sueldos y salarios.

En este sentido, la pertinencia del debate constituyente es obvia. Un gobierno revolucionario para distribuir su Presupuesto Nacional en beneficio de las grandes mayorías y de acuerdo a la máxima socialista: "De cada uno según su capacidad, a cada uno según sus necesidades" sólo puede hacerlo revolucionando los aportes al Fisco, recaudando impuestos directos, claros y transparentes donde los que más tienen más aportan.

4. Recuperar el Salario Mínimo Nacional y el resto de los Salarios cercanos al Salario Promedio.

Venezuela, para el año 2012 el salario mínimo era de 476 dólares, si se convierte a 4,30 bolívares. Pero con la nueva tasa de cambio bajaría a 324, 92 dólares y en consecuencia la nación quedaría entre el grupo de los países con el salario más bajo en Latinoamérica.
"Con 324 dólares, Venezuela aún se mantiene dentro de un rango promedio, pero estamos lejos de tener el mejor salario mínimo en Latinoamérica" un encarecimiento de los productos importados y de los productos de origen nacional que utilizan materia prima importada"

2012 (septiembre) Bs 2.047,52 / 4,30 = 476,17 US$
(476,17 - 325,00) US$ = 151,17 US$
2013 (febrero) Bs 2.047,52 / 6,30 = 325,00 US$ Devaluación con relación al US$ = 952,37 Bs 

Chávez informó que el incremento beneficiará a 345 mil 877 empleados de carrera y 62 mil 441 obreros; 2 millones 52 mil 295 jubilados y pensionados y a 98 mil madres del barrio. Sostuvo que el presupuesto destinado a este fin es de Bs.F 5 mil 239 millones x 12 meses.

miércoles, 18 de septiembre de 2013














Botaron a Manuel Lazo de RNV

A Manuel Lazo, director del Canal Clásico de la Radio Nacional, lo botaron de ese puesto que venía ejerciendo por más de diez años. A primera vista es un hecho hasta normal, gente sale y gente entra en esos empleos. Pero si relacionamos lo que ha pasado en los últimos meses comprenderemos que estamos frente a una embestida contra el pensamiento insumiso, contra la frescura de la discusión. Los nubarrones de la mediocridad, del nopensamiento que adula, del cliché que mata revoluciones, se apodera del cielo de la libertad que, con Chávez, la nación había disfrutado.
Han sacado del aire a muchos programas de radio y televisión, son variadas las razones, se alega cambio de horario, que hay exceso de exquisitez, que patatín, que patatán, pero lo cierto es que salen los programas más críticos, salen los directores más libertarios, y todos de manera grosera, desconsiderada. Triste papel el de estos que dirigen las comunicaciones del gobierno, prestándose para el asesinato de la savia de la Revolución: el pensamiento, la crítica.
¿Qué está pasando? Al principio la situación era confusa, pero ya todo se va aclarando: El pacto económico con la burguesía capitalista nacional e internacional reclama su correspondiente político, una política engranada con ese pacto. Ahora se impone la no agresión a los bandos cómplices, ni atacar aquí ni atacar allá, la crítica se hace más incómoda que nunca, es necesario ir a territorios que no hagan daño, quizá que levanten humo pero que no cuestionen el fondo de las políticas que se adelanten. Puros fuegos artificiales, pura espuma, un poco de retórica, unos cuantos clichés, invocar un poco el pasado acompañando una práctica de estimulo al capitalismo, tal como declaran los voceros económicos.
La pérdida de la crítica, del pensamiento no sumiso, es el camino de la caída de la posibilidad socialista pero también es el camino más seguro para entregar el país al fascismo. Un gobierno revolucionario sin pensamiento crítico es un gobierno débil, incapaz de rectificar, ciego, percibiendo la realidad sólo con su propio ombligo. Así construye su destrucción, cava su sepultura. La debilidad, el dejar a la masa desamparada a merced de espejismos voluntariosos, es combustible para un zarpazo fascista.
Ahora más que nunca es necesario hablar, usar internet, las redes, las radios que aún resisten los embates del reformismo. Ahora es necesario, más que nunca, participar en la “feroz lucha interna”.
Hablar implica riesgos, al principio los ataques son suaves: una sacada del aire, una pérdida del empleo. Luego, lo sabemos, la historia lo dicta, arreciarán la embestida. El capital nacional e internacional es capaz de todo por defender sus privilegios, no tolera que corran el velo que cubre su impudicia, no soporta que enturbien sus negocios. Sin embargo, es un deber con el recuerdo verdadero, profundo, del Comandante Chávez, de su sueño de Socialismo, de su amor a la humanidad, que sigamos hablando.
Saludos Manuel Lazo, gracias por tu ejemplo de dignidad, estamos contigo.
www.elaradoyelmar.tv / elaradoyelmar@gmail.com
De Lunes a Viernes 6 pm. en Makunaima Kariña (104.9 FM)

martes, 10 de septiembre de 2013








Fuera Ministro Merentes

Nelson Merentes, actual Ministro de Finanzas y ex Presidente reciente del Banco Central de Venezuela, no debería formar parte del ejecutivo nacional porque su posición en relación con el dólar paralelo es contraria a la del Presidente Maduro quien ha señalado que Nosotros le vamos a torcer el brazo al dólar paralelo, vamos con todo, no le tenemos miedo a esas mafias (VTV, 21/03/13, estaba el dólar paralelo en Bs. 23,20). Merentes, por el contrario, ha estado buscando acuerdos con empresarios e inversionistas de Fedecámaras, los mismos que utilizan el dólar oficial para obtener ganancias cambiarias en el mercado paralelo, sobrefacturan sus importaciones y nos venden los pocos productos que traen a precios del dólar paralelo. Los mismos que utilizan el dólar paralelo para justificar exageradísimos aumentos de precios, causar más inflación y llevarnos a una próxima devaluación. Llego a ésta y a otras conclusiones luego de analizar la entrevista que le hizo José Vicente Rangel el pasado domingo 1° de Septiembre.
Estemos claros. Con el dólar paralelo y su alza continua están totalmente de acuerdo sus beneficiarios, los que tienen cuentas en dólares en el extranjero, los dolarizados, un pequeño porcentaje de venezolanos; quienes venden a precio de dólar paralelo dólares públicos comprados a precio preferencial y quienes lo utilizan como marcador para justificar exagerados aumentos de precios. Los empresarios e inversionistas de Fedecámaras forman parte de estos tres grupos. Los demás venezolanos, la inmensa mayoría de la población, somos víctimas del dólar paralelo, de la inflación que causa y de la devaluación que promueve. El dólar paralelo le hace mucho daño al gobierno porque los exagerados aumentos de precios generan un profundo malestar en la población, que se traducirá en una disminución de la votación oficial en las elecciones municipales y en las que vendrán. Los exagerados aumentos de precios son utilizados por la oposición para culpar al gobierno (¿Sabes cuánto aumentaron los huevos?). La oposición señala que al gobierno le conviene la devaluación porque así obtiene más bolívares por dólar, argumento falaz porque las devaluaciones tumban los gobiernos porque destruyen su base de apoyo.
El ciclo inflación-devaluación lleva 30 años en Venezuela, pero el dólar paralelo en internet es una invención de comienzos del año pasado con lechugaverde.com, cuyos dueños, por cierto, estafaron y desaparecieron. Desde entonces el dólar paralelo ha aumentado sin cesar. En 2012 el dólar paralelo aumentó 84,25% al pasar de Bs. 9,43 a 17,43 y en lo que va de este año 2013 (8 meses) 113,31%, de Bs. 17,43 a 37,18 (tucadivi.com). Durante 2012 y lo que va de 2013 el dólar paralelo ha aumentado 294,27%, o sea, casi ha cuadruplicado su precio.
¿Qué han hecho MinFinanzas y BCV durante los últimos 20 meses para contrarrestar el dólar paralelo? Nada o casi nada, porque Cadivi y Sicad de nada han servido. El dólar paralelo en continua alza, los precios aumentando semana tras semana, la población sufriendo los embates económicos, el gobierno perdiendo votos, y MinFinanzas y BCV callados, como si todo estuviera normal. Ahora, después de 20 meses de crisis aguda, Merentes declara que para contener el alza del dólar paralelo hay que modificar la Ley de Ilícitos Cambiarios y la Ley del Mercado de Capitales, lo que llevará unos cuantos meses más y no garantiza ningún resultado. Tarde piaste pajarito, diría Luis Herrera. ¿Es ésta una respuesta razonable del máximo responsable de las finanzas venezolanas a un gravísimo problema que lleva 20 meses en pleno desarrollo y que ha afectado violentamente el poder adquisitivo de nuestro Bolívar? No señor.
Pronto el precio falso del dólar paralelo llegará a Bs. 40. Merentes no ha cumplido con sus responsabilidades. ¿Y por qué no las ha cumplido? Porque, en vez de defender el poder de compra del Bolívar, Merentes ha estado negociando un acuerdo con Fedecámaras, acuerdo que nunca conseguirá, a menos que acepte el dólar paralelo, porque los intereses de Fedecámaras están del lado de los $400.000.000.000. Los empresarios e inversionistas de Fedecámaras desean fervientemente que el dólar paralelo llegue a las nubes, porque son beneficiarios directos de las ganancias cambiarias, porque el dólar paralelo es su marcador de precios, porque el dólar paralelo impulsa la inflación, porque la inflación lleva a otra y otra devaluación y porque esta estrategia suma y suma votos para la oposición.
Dice Merentes durante la entrevista, que él se ha reunido con unos 5.000 empresarios. Lo que hicimos con los empresarios fue ponernos de acuerdo con un diagnóstico de los problemas coyunturales que presenta la economía (flujo de divisas, Certificados de No Producción, problemas logísticos en los puertos). O sea, Merentes ha dedicado muchos meses a discutir con los empresarios cómo resolver sus problemas. También dijo que había hablado con algunos diputados del PSUV. ¿Se habrá reunido Merentes con los representantes de los trabajadores, las amas de casa, los beneficiarios de las misiones, los pensionados, con quienes sufren en carne propia los aumentos de precios y podrían aportar otras estrategias de lucha? El hecho de que Merentes haya resaltado sus reuniones con los empresarios denota su sesgo ideológico. El cree que allí está la solución del dólar paralelo, por eso no lo ha podido resolver, porque por esa via no hay solución. Merentes busca las soluciones con quienes causan el problema. Necesitamos un Ministro de Finanzas que no busque en Fedecámaras ni en un cambio futuro de leyes la solución al grave problema del dólar paralelo.
Con respecto a la inflación Merentes dijo: Si sufrimos de una inflación alta todos la padecemos. Si corregimos el problema de la inflación en 3 años todos nos vamos a beneficiar. En cuanto a la primera frase, todos no padecemos por igual la inflación. La inflación es un fenómeno diferenciado. Es bien sabido que golpea con más fuerza a quienes menos ganan, porque son quienes destinan una mayor parte de sus ingresos a la compra de alimentos, el sector con los mayores aumentos de precios. A las clases A y B no les preocupa la inflación. La segunda frase es la más preocupante porque desconoce la realidad. Quienes se benefician con los aumentos del dólar paralelo quieren que la inflación suba y suba porque saben que la alta inflación lleva a la devaluación, que es el éxito total. El descenso de la inflación perjudica a los dolarizados porque aleja la devaluación. La inflación es muy beneficiosa para quienes con ganancias cambiarias compensan varias veces los aumentos de precios.
En resumen, necesitamos un Ministro de Finanzas que enfrente con análisis serios y decisiones bien pensadas este grave problema, que genere soluciones que realmente lleven a la reducción del precio del dólar paralelo, no que después de 20 meses de crisis ofrezca como solución la modificación de algunas leyes, que se reuna con quienes sufren el problema y no con quienes lo causan, que esté en realidad dispuesto a torcerle el brazo al dólar paralelo, como dijo el Presidente Maduro, que lea correctamente la realidad y sepa que los dolarizados promueven la inflación porque saben que lleva a la devaluación, que mantenga informada y activada a la población en relación con tan importante problema.
Durante este año he escrito ocho artículos sobre el dólar paralelo, todos publicados por Aporrea, y he propuesto varias soluciones. A quien pueda interesar, a continuación las direcciones en internet: www.aporrea.org/internacionales/a171977.html (18/08/13),www.aporrea.org/actualidad/a170350.html (22/07/13),www.aporrea.org/contraloria/a169015.html (30/06/13),www.aporrea.org/contraloria/a168558.html (22/06/13),www.aporrea.org/actualidad/a164737.html (29/04/13),www.aporrea.org/actualidad/a159623.html (19/02/13),www.aporrea.org/actualidad/a159033.html (09/02/13) ywww.aporrea.org/actualidad/a156832.html (01/01/13).

sábado, 7 de septiembre de 2013








Venezuela: ¿quién construye más rápido el camino hacia el FMI?

En la delicada coyuntura económica que atraviesa el proceso político venezolano, dos propuestas, una emanada de los sectores económicos dominantes identificados directamente con la oposición, y otra, proveniente de un sector que ha ocupado las colinas de instituciones estratégicas en la toma de decisiones económicas gubernamentales, coinciden peligrosamente en retorno a los caminos neoliberales, y el abandono del camino trazado por el chavismo en los últimos 14 años.
La propuesta de la derecha oposicionista la denominaremos “paradigma del eterno retorno de los economistas del Capital”; mientras que la propuesta que predomina actualmente en el gobierno se llamará, indistintamente, “opción pragmática” o “paradigma tercera vía renovada”
Lo importante a destacar, es que el alto posicionamiento  de ambas visiones, revela una debilidad recurrente del proceso chavista-bolivariano: el precario desarrollo de una política económica acorde con los planteamientos estratégicos esbozados en los dos planes socialistas.
De hecho, la propuesta económica que adoptó el gobierno del Presidente Nicolás Maduro se impuso porque representa una opción “pragmática”, frente al quiebre del esquema cambiario y frente a las necesidades de financiamiento del gasto público, que puede significar un cambio de orientación de lo que han sido los rasgos fundamentales del proceso chavista en sus 14 años de gobierno. 
El eterno retorno de los economistas del Capital
La primera propuesta económica va de la mano con la estrategia política de la derecha oposicionista y parte de un diagnóstico catastrófico en la economía, de tal forma que sea inevitable aplicar las fórmulas ya conocidas en Venezuela y en el mundo. Son los que plantean que ante la “bomba atómica económica” y el “tsunami cambiario”[1], hay que hacer un cambio urgente del modelo económico chavista.  Las recomendaciones básicas son una repetición de los argumentos típicos del Consenso de Washington y del llamado Post-Consenso de Washington: respeto a la propiedad privada, disciplina fiscal, reducción del gasto público, autonomía del Banco Central, desmontaje del proceso de integración regional (especialmente el relacionado con Petrocaribe y el ALBA); alineación con los tratados de libre comercio y con el Eje del Pacífico;  además de una reversión en la política petrolera interna y externa.
Esta propuesta parte de la convicción que la inflación se debe a causas monetarias. La mayoría de los economistas repiten el diagnóstico monetarista que atribuye al exceso de gasto público, y al financiamiento monetario del Banco Central, como la principal causa de la inflación y de los altos valores del tipo de cambio paralelo.
Es una opción que significaría un cambio radical del modelo económico chavista. Recomienda volver a las premisas básicas que intentaron imponer los grupos económicos en los años noventa. Retoman no sólo a la política de ajuste estructural del Gran Viraje (1990-1994), sino a las propuestas del Grupo Roraima liderizado -en ese entonces-  por Marcel Granier y Moisés Naim; avaladas académicamente por el Instituto de Estudios Superiores de Administración (IESA).  Sectores que en ese tiempo eran un espejo de las políticas modernizadoras que aconsejaba los mandamientos del llamado Consenso de Washington.
En la actualidad, se agregarían a este enfoque algunos aportes  del Post-Consenso de Washington, como lo es el reconocimiento de la intervención del Estado para crear las condiciones institucionales de una economía capitalista exportadora y moderna.
Por tanto, no hay nada nuevo bajo esta estrategia. En todo caso, trataría de institucionalizar las misiones sociales chavistas, para mitigar la conflictividad social que se les vendría encima de llegar a gobernar.
Este proyecto económico, necesitará un modelo político donde se reconstruiría el pacto de Punto Fijo, con la concurrencia de los actuales actores oligárquicos agrupados en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD).
El tercer camino resucitado
La otra propuesta viene de sectores que han logrado una gran influencia en las instituciones económicas y financieras del Estado, espacios de poder donde se toman las grandes decisiones.  Considerando la hegemonía que han logrado, puede considerarse  que representan la actual visión del Gobierno. En este caso, se propone un modelo de crecimiento con un sesgo exógeno (promoción de las exportaciones no petroleras), con cierta dosis de Estado de Bienestar, en línea con la asesoría de la socialdemocracia heterodoxa europea.
Es una versión del “progresismo moderno”, que mantiene el discurso socialista, pero con propuestas que tenderán a contradecir la historia de los últimos 8 años, y, por tanto, especialmente, su estrategia se confrontará con el intento por construir el Socialismo del Siglo XXI.  Las ideas principales de esta visión se han expresado de la siguiente manera:
a)  Las exportaciones petroleras no son suficientes para proveer las divisas (dólares principalmente) necesarias para sostener el crecimiento económico
b)  Por tanto, hay que desarrollar un sector exportador no petrolero que genere divisas
c)  Para lograr esta orientación exportadora y cerrar el déficit de dólares en CADIVI y en el SICAD[2], hay que atraer la inversión extranjera directa al mismo tiempo que promover un tipo de cambio de mercado, competitivo.
d)  Hay que desmontar el control de cambios progresivamente. En el corto plazo, promover un  mercado de divisas con un marcador referencial, como paso previo a la apertura de las transacciones externas
e)  Hay que recurrir a los mercados internacionales para buscar financiamiento. El énfasis aquí es restablecer las relaciones con los Bancos de Inversión[3] tradicionales (Credit Suisse, JP Morgan Chase, Nomura, Bank of America, Citigroup, Barclays, etc)  para buscar mecanismos de endeudamiento externo
Esta agenda tiene a su favor, un conjunto de problemas  económicos que se acumularon desde 2008, entre los que resaltan:
a) Un desorden en el manejo y ejecución de fondos públicos, en divisas, debido a una gran autonomía de los responsables de su administración;
b) mantenimiento durante casi tres años de niveles críticos de reservas internacionales líquidas, lo cual favoreció el ataque cambiario y el precio especulativo del paralelo;
c) Manejo discrecional de pagos en dólares por parte de instituciones y organismos públicos;
d)  La omisión ante las permanentes violaciones –por parte del sector privado y de los “ciudadanos”- de la normativa de CADIVI, tal como están saliendo a flote en este momento con las numerosas detenciones por parte de los cuerpos de seguridad;
e) fortalecimiento de la tendencia a la dolarización, a través de la emisión indiscriminada de deuda en dólares, apertura de cuentas de ahorro en dólares, tolerancia ante la fuga de capitales y frente a la participación de la banca en la especulación cambiaria .
¿Cómo funciona el modelo?:
De acuerdo a este tipo de modelo económico, para promover un sector exportador no petrolero, hay que propiciar el tipo de cambio “competitivo”, eliminando significativamente la sobrevaluación. Esta premisa termina siendo  antagónica no sólo con el ineficiente control de cambio actual, sino con cualquier control de cambio. Promover el tipo de cambio competitivo, significa en el fondo reducir el costo relativo de la fuerza de trabajo. Esto implica, que las exportaciones contarán con un estímulo oculto en la estrategia del tipo de cambio competitivo: salarios que permitan competir internacionalmente y, que hagan posible obtener las ganancias que sean atractivas para las inversiones.
Como las inversiones de los capitalistas nacionales son insuficientes, se tienen que “atraer” las inversiones extranjeras. La atracción de estas inversiones lleva a dos grandes estímulos: contracción salarial y recursos naturales baratos. En América Latina, este esquema exportador  ha tenido “éxito” en cuanto a generar un crecimiento económico estable, como en los casos de Chile y Perú. Pero no es casual que esta expansión esté acompañada  del aumento de los niveles de desigualdad, desnacionalización del aparato productivo y una mayor dependencia de la exportación de recursos naturales.
Lo más delicado de esta propuesta, es que se está acompañando con una estrategia de endeudamiento externo, mediado por la banca de inversión, que conducirá a la disminución de la soberanía en la política económica.  
El modelo, al cerrar con endeudamiento externo, se verá obligado a cumplir con las condicionales que imponen las instituciones financieras internacionales, primero caerá en manos de la banca internacional y luego necesitará más financiamiento para cubrir el servicio de la deuda externa.
Dentro del condicionamiento y del acorralamiento financiero, se verá obligado a revertir las nacionalizaciones y las estatizaciones que llevó a cabo desde 2005.  Aquí no hay ideas innovadoras: al contrario, en América Latina hay ensayos de este tipo. Lo interesante es que, representando una influencia de la socialdemocracia internacional, en un intento de “domesticar”, “occidentalizar”, y “civilizar” lo rebelde del proceso chavista-bolivariano, termina coincidiendo estratégicamente con el paradigma oposicionista.
Esta visión cuenta con el respaldo de sectores privados, especialmente el poderoso sector bancario-financiero que se ha beneficiado del modelo de acumulación en los últimos nueve años. Sin embargo, también cuenta con aliados circunstanciales.
El economista Víctor Álvarez, mención especial del Premio Pensamiento Crítico, ha venido insistiendo en  señalar que el problema está en la existencia de un tipo de cambio sobrevaluado[4], y que hay que proponer un esquema  donde el tipo de cambio competitivo permita promover las exportaciones no petroleras. Aunque en su propuesta, propone temas claves como la industrialización y el desarrollo de la economía comunal, en el corto plazo asoma una vertiente liberal bastante ortodoxa, que es incoherente con una concepción progresista, heterodoxa y socialista [5]. Ciertamente, el ex-Ministro en sus análisis sobre la inflación no sólo tiene una gran coincidencia con el monetarismo neoliberal [6], sino que se coloca a la derecha de ellos, cuando utiliza conceptos como “el impuesto inflacionario” o “financiamiento monetario”.[7]
Es decir el modelo propuesto por los pragmáticos es: tipo de cambio competitivo, inversión extranjera directa, promoción de exportaciones y endeudamiento externo…
Esta clase de prescripciones, suponen que el gobierno está en serios aprietos financieros y tiene  que recurrir al endeudamiento externo. Por tanto, le terminan dando la razón a la oposición sobre la situación en cuanto que hay una crisis, o que se está a un paso de la crisis.
Cuesta explicar esta “crisis” fiscal y externa, donde escasean los dólares, en una economía donde le entraron al país alrededor de 97 mil millones de dólares en 2012 , tiene una cuenta corriente superavitaria de 11 mil millones de dólares, y el sector público tiene colocado  en el exterior 130 mil millones de dólares…[8]
Tal vez Francisco de Miranda, ayuda a comprender estas paradojas, con una premonitoria frase que le atribuyen: “¡Bochinche, bochinche!. ¡Esta gente no sabe hacer sino bochinche!.”
*Economista venezolano, miembro de la Sociedad de Economía Política Radical (SER)

[1] Ver entrevista al Economista Pedro Palma titulada “Un tsunami cambiario amenaza con barrer nuestra economía”, publicada enhttp://www.elmundo.com.ve/noticias/economia/politicas-publicas/un-tsunami-cambiario-amenaza-con-barrer-nuestra-ec.aspx
[2] Cadivi son las siglas por las que se conoce el control de cambio que opera en Venezuela desde 2003, que asigna dólares a una tasa oficial de 6,30 Bs.F. por dólar americano. Mientras que el SICAD (Sistema Complementario de Administración de Divisas) es una modalidad de subasta donde se asigna dólares a sectores o a personas a las cuales se le establece un criterio de prioridad. Su funcionamiento es muy reciente,  y en las últimas operaciones ha tenido que utilizar títulos, dándole la razón a la oposición sobre la grave iliquidez de dólares de Banco Central.
[3] Se le llama Banca de Inversión a todo este conjunto de Instituciones Financieras Privadas Internacionales, que han participado en el festín de la deuda externa de los países subdesarrollados. Involucrados en el proceso de financiarización y estafa masiva que significó la crisis financiera y que aparecen en la puerta de los países que tienen urgentes necesidades financieras, ofreciéndoles “productos financieros” que terminan por esclavizar a los pueblos. Son lo más parecidos a los prestamistas o casas de empeño del barrio, que te prestan para luego quedarse con tus posesiones. Sólo que esta mafia opera a escala planetaria y usan trajes de marca. Son la antesala para caer en las garras del Fondo Monetario Internacional.
[4] En una entrevista al Ex-ministro Álvarez, el economista llega a afirmar que “La tragedia de Venezuela no es la devaluación, sino su sobrevaluación…”. En la misma entrevista, se evidencia un estilo de análisis económico que tiene el poder mágico de desaparecer tanto la confrontación de clases como  el poder de los sectores hegemónicos.  Según esto, el capital financiero es un querubín mientras se le atribuye la culpa al gobierno, de tal forma que Alvarez afirma: “El principal incentivo de esa insaciabilidad o ninfomanía del dólar , lo ofrece la propia política cambiaria, vendiendo una divisa a un precio irrisorio de Bs 6,30, mientras el mercado dice que cuesta tres o cuatro veces más…”. Economista ¿Cuál mercado? El mercado paralelo ¿Es un mercado? Y en el caso que los sea ¿Ese es el tipo de cambio verdadero?  Ver entrevista en:
http://www.elmundo.com.ve/noticias/economia/politicas-publicas/entrevista---victor-alvarez--la-tragedia-de-venezu.aspx
[5] Ver “Principales retos económicos de Nicolás Maduro”, en http://www.aporrea.org/ideologia/a164872.html,
[6] Uno de los representantes del monetarismo ortodoxo ha sido el economista Alexander Guerrero, como referencia ver artículo “Venezuela en el umbral de la hiperinflación”, en http://alexanderguerrero.com/muestras.php?id=215#.UifkmMb2i8o
[7] El concepto de “impuesto inflacionario” es una bazofia ideológica que los ultramonetaristas han tratado de imponer para validar su posición. Se trata de explicar la inflación como resultado exclusivo de la acción del Gobierno, quien al aumentar la cantidad de dinero circulante en la economía, se mete en el bolsillo del pueblo y le cobra un impuesto. Con ello demuestra la capacidad que tienen los economistas neoclásicos de hacer ciencia-ficción, para tratar de hacer invisible la presencia del Capital y sus representantes.  Para una muestra de esta concepción monetarista, ver artículo de Alexander Guerrerohttp://alexanderguerrero.com/imagenes/PDF_02032013230510.pdf

[8] FUENTE: Banco Central de Venezuela. En http://www.bcv.org.ve/c2/indicadores.asp